WASHINGTON (AP) — Fueron años de sinsabores, eliminaciones tempranas y triunfos que parecían en la bolsa pero se convirtieron en tropiezos por infortunios. En ese sentido, era lógico que los Nacionales requirieran de un joven de 20 años, ajeno a esas tristes historias, para avanzar al fin en los playoffs.
Y quizás, sólo quizás, tiene sentido que el maleficio haya quedado roto por esta nueva versión de los Nacionales, que languidecían en mayo con 12 juegos por debajo de .500 y que saben cambiar su suerte, incluso cuando el panorama es oscuro.
El dominicano Juan Soto conectó un sencillo con las bases llenas contra Josh Hader, para producir tres carreras con dos outs en la parte baja del octavo inning, y Washington remontó para derrotar el martes 4-3 a los Cerveceros de Milwaukee en el juego de comodines de la Liga Nacional.
“Tuvimos un comienzo horrible, como todos saben, y nos prometimos que no nos rendiríamos”, comentó el manager boricua de los Nacionales, Dave Martínez, en una referencia que puede aplicarse por igual a la campaña que al juego del martes. “Les dije a los chicos: ‘Les prometo que si siguen adelante y no renuncian, esto cambiará’. Y cambió. Aquí estamos hoy”.
Luego que Hader llenó las almohadillas al golpear a un bateador, caminar a otro y permitir un sencillo de bate quebrado, Soto mandó una recta de 96 millas por hora al jardín derecho
Y la suerte cambió de bando.
La pelota escapó bajo el guante del jardinero Trent Grisham, en un error que permitió a los tres corredores llegar al plato
Asimismo, la pifia hizo posile que Soto llegara a la intermedia y avanzara después a la antesala. Eventualmente, el joven quisqueyano de 20 años fue sorprendido en los senderos, pero ello de poco importó: Había convertido un déficit de 3-1 en una ventaja de cara al último inning.
Soto aplaudió, se dio un golpe en el pecho, e intercambió una palmada con el coach de la antesala Bob Henley.
“¡Vámonos!”, gritó en español.
Stephen Strasburg lanzó tres innings en blanco para acreditarse la victoria en la primera aparición como relevista de su carrera en las Grandes Ligas, ya sea en temporada regular o playoffs. Daniel Hudson lanzó la novena entrada para el salvamento.
La derrota fue para Hader.
Los Nacionales, muy familiarizados con las derrotas dolorosas en los playoffs desde que se mudaron de Montreal antes de la campaña de 2005, avanzaron a la Serie Divisional del Viejo Circuito contra los campeones del Oeste, los Dodgers. El primer juego se disputará el jueves en Los Ángeles.
Washington tenía una foja de 0-3 en juegos de vida o muerte. Todos esos tropiezos se habían producido en el quinto encuentro de series divisionales, como local.
“Habíamos estado muchas veces aquí y nunca resultaba”, dijo Ryan Zimmerman, la primera selección de los Nacionales en el draft de 2005 y quien había vivido todas estas decepciones “Finalmente lo conseguimos esta noche”.
Esta vez fue diferente. Los Nacionales avanzaron al fin, aunque en un juego de comodines, no en una serie.
De cualquier modo, llegarán a la confrontación ante los Dodgers montados en una racha de nueve triunfos consecutivos. La Serie Divisional se define en un máximo de cinco encuentros.
La ansiada victoria de Washington llegó gracias a uno de los jóvenes que habían protagonizado la campaña regular. Soto, quien debutó en octubre, no se dejó asustar por el escenario, los playoffs ni el historial de corazones rotos en Washington.
Zimmerman llegó como emergente y conectó el sencillo de bate roto ante Hader, quien golpeó a otro bateador sustituto, Michael A. Taylor, con un lanzamiento. Los Cerveceros protestaron, al considerar que la pelota había impactado el tolete de Taylor y no su mano.
No hubo cambio en la decisión de los umpires tras revisar la repetición en video.
Hader, quien logró 37 salvamentos en la campaña, dio un boleto a Anthony Rendón, antes de enfrentar a Soto.
¿Qué pensaba el dominicano?
“Pegar un sencillo por el centro y tratar de empatar el juego”, dijo.
Hizo más que eso, gracias al descuido de Grisham. Los Nacionales le dieron la vuelta a un encuentro que había comenzado de forma aciaga.
El cubano Yasmani Grandal y Eric Thames dispararon sendos jonrones en los primeros dos innings frente al as de Washington, Max Scherzer, tres veces galardonado con el Cy Young, cuyos equipos habían perdido en cada una de sus siete aperturas más recientes dentro de la postemporada.
Desde el primer episodio, Milwaukee ostentó la delantera. La perdió en medio de una pesadilla en el octavo inning.
Por los Cerveceros, el cubano Grandal de 3-1 con una anotada y dos impulsadas. El venezolano Orlando Arcia de 4-1.
Por los Nacionales, los dominicanos Soto de 4-1 con dos impulsadas, Víctor Robles de 3-1. El venezolano Asdrúbal Cabrera de 3-0.