DAKAR, Senegal (AP) — El presidente del gobierno español Pedro Sánchez visitó Gambia el miércoles, como parte de una gira por tres naciones de África Occidental, con el objetivo de fomentar la cooperación para controlar la migración irregular desde esa región hacia las Islas Canarias.
Sánchez se reunió con el presidente de Gambia, Adama Barrow, y dijo más tarde que ambos países acordaron trabajar conjuntamente en temas de seguridad, así como en oportunidades para la migración legal y temporal, pero no dio más detalles. “España quiere dar un nuevo ímpetu a África, que es una región prioritaria”, dijo Sánchez en Banjul, la capital.
Esta es la primera vez que un presidente español visita el pequeño país, de 2,7 millones de habitantes. Sánchez inició su gira el martes en Mauritania, donde dijo que España renovaría la cooperación entre las fuerzas de seguridad de ambos países para combatir el tráfico de personas. Planeaba reunirse el jueves con dirigentes de Senegal.
Las tres naciones de la costa de África se han convertido en los principales puntos de partida de los migrantes que tratan de llegar a las Islas Canarias, un archipiélago español situado cerca de la costa africana que los migrantes y refugiados usan como punto intermedio para tratar de llegar al territorio continental europeo.
Más de 22.000 personas han desembarcado en sus costas desde enero, de acuerdo con el Ministerio del Interior español, más del doble que el número de llegadas irregulares durante el mismo periodo del año pasado.
Sánchez también se reunió con un pequeño número de agentes españoles del orden público que están en Gambia para ayudar al país a aplicar la ley en sus fronteras. Siete miembros de la Guardia Civil y dos policías españoles han sido desplegados en el país, que tiene el área más pequeña de África continental.
Barrow agradeció a España por la ayuda de los agentes para afrontar la migración irregular, diciendo que han proporcionado una cooperación “fantástica”.
Entre los migrantes que llegan a las Canarias, hay miles de refugiados malienses que huyen de la violencia y la inestabilidad de la nación del Sahel, así como jóvenes de Senegal, Mauritania y otros países de África Occidental que buscan mejores oportunidades de trabajo en el extranjero. Asimismo, hay cada vez más adolescentes y niños que viajan solos a las Islas Canarias, lo que ha abrumado al gobierno local responsable de su cuidado.
El año pasado, más de 4.000 gambianos llegaron a Europa a través de la mortífera ruta del Atlántico, según el organismo migratorio de la ONU. El mes pasado, una embarcación con 300 migrantes, principalmente de Gambia y Senegal, volcó frente a las costas de Mauritania. Más de una docena de personas murieron y al menos 150 más desaparecieron.
La periodista de The Associated Press Renata Brito en Barcelona contribuyó a este despacho.
(Europa Press vía AP, Archivo)
By MARK BANCHEREAU