SAN FRANCISCO (AP) — El jefe de policía de un pequeño condado de California contuvo las lágrimas cuando describió al agente que fue asesinado a tiros como un patriota que luchó duro para servir a su país adoptivo, mientras dijo que el presunto asesino cruzó la fronterailegalmente y que fue un “cobarde”
Ronal Singh, un migrante de Fiji, fue atacado a disparos luego de detener a un presunto conductor ebrio en Newman, al sureste de San Francisco, alrededor de la 1 de la madrugada del miércoles.
Hubo un tiroteo en el que Singh “trató absolutamente de defenderse”, pero aparentemente no alcanzó al sospechoso, dijo el jueves el jefe de policía del condado de Stanislaus, Adam Christianson, cuya oficina lidera la investigación.
El sospechoso permanece prófugo y es considerado armado y peligroso. Aunque se alertó a las agencias policiales en todo California, se cree que el hombre todavía está en la zona.
“Lo encontraremos, lo arrestaremos y lo llevaremos ante la justicia”, dijo el alguacil.
El jueves, los investigadores registraron una granja en la ciudad de El Nido, en el vecino condado de Merced, pero no encontraron al sospechoso, dijeron las autoridades.
Su nombre no ha sido revelado pero estaba en Estados Unidos ilegalmente. “No pertenece aquí. Es un criminal”, dijo Christianson el jueves.
El presidente Donald Trump _que quiere que el Congreso apruebe 5.000 millones de dólares para un muro fronterizo_ tuiteó el jueves sobre el asesinato de Singh y concluyó con: “Es hora de ser duros con la seguridad fronteriza. ¡A construir el muro!”.
Singh, de 33 años y con un hijo recién nacido, era un “patriota estadounidense”, dijo el jefe. “Vino a Estados Unidos con un solo propósito y fue servir a este país”, agregó Richardson.
A Singh le sobreviven su esposa, Anamika y su hijo de 5 meses.